miércoles, 2 de octubre de 2013

CHEESECAKE DE BAILEYS








INGREDIENTES

Para la base

-160g de galletas digestive
-3 cucharadas de azúcar moreno
-80g de mantequilla

Para la tarta

-800g de crema de queso
-160g de azúcar
-3 cucharadas de harina
-4 huevos M
-65ml de nata líquida
-80ml de Baileys

Para la cobertura

-170g de chocolate negro troceado
-140ml de nata
-40g de mantequilla
-80ml de Baileys

Para decorar

-Cacahuetes rebozados de chocolate
-Fideos de chocolate

PROCEDIMIENTO

Para la cobertura

Colocamos el chocolate en un bol al calor.
En un cazo calentamos la nata hasta que empiece a hervir. La echamos sobre el chocolate y removemos hasta que la mezcla sea homogénea y el chocolate este totalmente derretido. Incorporamos el Baileys y removemos. Cubrimos el bol con film y lo dejamos templar hasta el momento de usarla.

Para la tarta

Precalentamos el horno a 180ºC.
Engrasamos nuestro molde desmontable con un poco de mantequilla.
Fundimos nuestra mantequilla y retiramos del fuego. Trituramos las galletas, las mezclamos con el azúcar y añadimos esta mezcla a la mantequilla fundida. Mezclamos bien.
Cubrimos la base de nuestro molde con esta mezcla y lo metemos en el frigorífico para que endurezca.

Ahora continuamos batiendo a velocidad baja el queso con el azúcar blanco y la harina hasta obtener una mezcla homogénea. Incorporamos los huevos uno a uno. Finalmente añadimos la nata mezclada con el baileys y batimos de nuevo, lentamente hasta que este todo bien integrado.

Sacamos la base del frigorífico y la cubrimos con la masa de queso.

Horneamos la tarta durante 20 minutos a 180ºC y continuamos horneando al menos 60 o 70 minutos mas a 120ºC o hasta que la superficie haya cuajado y solo quede el centro algo húmedo.

Dejamos que enfríe a temperatura ambiente y después la metemos en el frigorífico un par de horas para que logre la consistencia adecuada.

No metáis nunca la tarta caliente al frigorífico porque se rajará.

Cuando hayan pasado un par de horas la sacamos, la desmoldamos, le ponemos la cobertura y decoramos.

Antes de servir sacarla media hora antes del frigorífico.

Así es como me quedó:









Así se veía por dentro:




Estaba riquísima, no tiene nada que ver con otras cheesecake que he probado hasta ahora, porque no es la típica que se hace con gelatina que todas saben a lo mismo. Esta es diferente y de verdad que merece la pena hacerla porque tiene un sabor y textura únicos. Os lo recomiendo 100x100.

by Belén






No hay comentarios:

Publicar un comentario